A las dos de la tarde y cuatro minutos, Carlos Costas, director de ADN Radio, bebió un sorbo de agua mineral y se acercó al micrófono para dar comienzo al programa deportivo "Los Tenores".
"Quisiera comenzar diciéndoles que estamos afectados como equipo y que no reconocerlo sería una falsedad. Esta no es la primera, pero sí espero que sea la última vez que me toque leer este tipo de declaraciones", dijo Costas, en relación a la polémica que explotó con la entrevista que se le hizo la semana pasada al director deportivo de selecciones nacionales, Francis Cagigao, y la pelea que protagonizó con Juan Cristóbal Guarello.
Invitado al programa, Cagigao se contactó vía correo electrónico con Rodrigo Hernández, director del área deportiva de la emisora, y pidió dos cosas: la posibilidad de replicar a Guarello por diversos comentarios en columnas y opiniones, en La Tercera y la misma ADN, y que el interpelado se encontrara presente en el set. En un segundo email, Cagigao solicitó además un espacio previo de diez minutos para rebatir punto por punto las denuncias de Guarello, relacionadas básicamente con una supuesta relación con representantes de futbolistas y malos tratos con el personal de Pinto Durán, entre otras acusaciones. Hernández aclaró este martes que informó al equipo sobre la presencia de Cagigao y que pedía tener a Guarello en frente, pero no alcanzó a leer el segundo correo por encontrarse con licencia médica la semana pasada.
Guarello comentó al aire ese día que se trataba de una encerrona y que a él nadie le dijo que Cagigao tendría esos IO minutos libres para responderle. Entonces se produjo un duro intercambio entre ambos y terminaron acusándose de "chanta" y "mentiroso". Un par de días después del round, se filtró en redes un audio de Luka Tudor en el que confirmaba que sabía con anterioridad que Cagigao iba a enfrentar a Guarello. "Lo va a destrozar", dijo. Finalmente, con el escándalo desatado, Guarello y Tudor renunciaron.
Con todo ese contexto sobre la mesa, Carlos Costas y luego el resto de los panelistas reflexionaron sobre el hecho.
"No podemos justificar la descortesía hacia ningún entrevistado y mucho menos si es un invitado que tiene la disposición de venir a nuestros estudios, entregar su versión de los hechos y responder preguntas", indicó Costas, en uno de los puntos relevantes de un comunicado que leyó a nombre de la emisora. "Queremos ofrecer sinceras disculpas a nuestro público, que pudo haberse sentido ofendido por el tono agresivo que acompañó la entrevista. En ningún caso representa el estilo ni la línea editorial de ADN, sino todo lo contrario", añadió en otro párrafo.
"Estos micrófonos siempre estarán a disposición del encuentro, el entendimiento y la discusión respetuosa e informada que nos merecemos como país con el estándar que hoy nos exige la ciudadanía", señaló Costas.
Rodrigo Hernández, en tanto, también realizó un mea culpa y desmintió cualquier tipo de "encerrona". Aclaró que su licencia médica fue por un problema en la espalda y les pidió disculpas a Guarello y Costas por su omisión. "Lamento profundamente no haber sido capaz, como director del área, de atacar la distancia que se fue generando en el tiempo entre Juan Cristóbal y Luka, que se fue amplificando, creciendo hasta un límite insalvable", agregó Hernández.
Las redes sociales explotaron en torno a lo que a esa hora sucedía en el programa y la intervención de Francisco Mouat, otro de los fundadores del programa, fue celebrada. "Si esas eran las condiciones, Cagigao no debió haber venido al programa. Pero vino. Porque nosotros se lo permitimos", señaló el escritor y también fundador del programa.
"Cagigao con escopeta y municiones en nuestra propia casa decidido a dispararle a uno de los nuestros en un formato casi de fusilero, porque esas eran las condiciones para visitarnos", añadió Mouat, que además comentó la posición de Guarello: "Juan Cristóbal perdió el control, se equivocó, y la jauría atenta sacó provecho del momento para amplificarlo y convertirnos en alimento para el show del morbo".