Los clientes y funcionarios de la notaría Jorge Carvallo escucharon dos veces el mismo sonido, fuerte y seco, como dos pequeñas explosiones, al interior del recinto ubicado en el centro de Santa Cruz, en la Región de O'Higgins.
Algunos testigos que estaban en el lugar dijeron más tarde que pensaron que estaban en medio de un asalto.
Sin embargo, lo que escucharon fueron los dos disparos que realizó Octavio Vallejos (71) en la oficina del notario Jorge Carvallo (77): uno fue en contra de este abogado, y el otro en contra de él mismo y que le costó la vida.
El subcomisario Sebastián Sotomayor, de la Brigada de Homicidios de Rancagua, dijo que tras la agresión el notario fue trasladado al Hospital de Santa Cruz, donde permanece internado sin riesgo vital.
La fiscal Carmen Gloria Agurto, de la fiscalía local de Santa Cruz, contó que de acuerdo a la declaración de los testigos, Vallejos conocía hace tiempo al notario, y que en el pasado tuvieron un vínculo comercial.
"De alguna forma, la ofuscación desmedida por parte del agresor se vincula al negocio. Esto es materia de investigación", comentó.
Una disputa económica, que según el subcomisario Sotomayor se originó "de una sociedad que tuvieron en común, cuestión que debe ser comprobada mediante declaraciones de testigos".
La persecutora también reveló que durante la mañana de ese martes, antes de la balacera en la notaría, el fallecido atacante atacó a otras dos personas.
"Su propio hermano y un trabajador hicieron una denuncia en la tenencia de Chépica: ambos declararon que Vallejos les habría disparado y que algunos balazos impactaron en bienes materiales (una camioneta), sin alcanzarlos a ellos", detalló.
Ruperto Palma, funcionario de la notaria, comentó sobre el estado de salud del abogado. "Según el reporte del médico, él se encuentra bien pero tiene dos costillas fracturadas. El proyectil aún lo tiene incrustado en su cuerpo (al costado del tórax)".