La batalla judicial entre Luciana Salazar y su ex novio, el economista Martín Redrado, con quien duró más de una década, sumó un nuevo capítulo luego de que la justicia le diera el favor a la modelo que demandó al que fuera el presidente del Banco Central argentino hasta enero de 2010 por no pago de la pensión alimenticia de su hija Matilda, de casi cinco años.
Pese a que desde 2018 ya no están juntos y que Redrado se casó este año en Italia con otra mujer, Luciana hizo valer un acuerdo que el actual director general de Fundación Capital firmó cuando aún eran pareja, y por una medida precautoria del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil N° 85 a él le embargaron una cuenta en el Banco Galicia por adeudar "10 meses de cuota alimentaria", según revista "Caras" Argentina.
"Fue un proyecto conjunto que Matilda (que nació por vientre subrogado con los óvulos congelados de la rubia) viniera al mundo. Él firmó documentos que garantizan todos los derechos de mi hija en los que se compromete a pagar hasta que ella cumpla la mayoría de edad (18 años)", expone Salazar.
-¿Por qué cobrarle si ya no tienen ningún vínculo, Luciana?
-Primero y principal es un acuerdo que él firmó con respecto a la cuota alimentaria de mi hija. Estando o no en pareja ese no es el tema porque él hizo posible que Matilda viniera al mundo, corrió con todos los gastos referentes a la congelación de óvulos y la subrogación.
-¿Corresponde aunque no sea el padre biológico?
-No es el padre biológico, pero hoy hay varios tipos de familia que ya no son la tradicional. Hay situaciones que corresponden a su intimidad y a la mía que no voy a hablar. El día de mañana se las contaré a mi hija porque ella es la primera que debe saber cómo fue su historia.
-¿Redrado visita a Matilda?
-Me Io pedía constantemente y le di muchas oportunidades, pero ya no. Cuando ella sea mayor de edad o tenga un poder de decisión y quiera verlo, por supuesto que voy a respetarla.