Bastián Roco tiene 19 años, es hijo de Sebastián "La Roca" Roco y es uno de los rostros del recambio que asoman en el futbol chileno. En la Roja Sub 20, que se prepara para disputar el Sudamericano de Colombia que dará cuatro cupos para el Mundial de Indonesia 2023, fue titular en ambos triunfazos en noviembre ante Brasil y ya acumula 180 minutos sumados en los amistosos jugados hasta el 16 de diciembre.
"Como aún no dan lo nómina definitiva, mi gran objetivo es estar en la lista del Sudamericano y después ojalá poder jugar el Mundial. Pero paso a paso, en la Sub 20 hay un grupo muy lindo, muy unido, y aunque me junto más con los muchachos de la U como Osorio o Assadi, todos son muy buenas personas", dice con entusiasmo el zaguero perteneciente a las filas de Huachipato y que en 2022 sumó en el equipo acerero 730 minutos en la cancha.
"Desde la Sub 15 que está en el proceso de la Selección y también ha estado citado en la Sub 23. Y cuando un niño se ha criado toda la vida en un camarín, pasa eso: tiene la motivación y el sueño de ser futbolista. Ahora es el central con más minutos en la Sub 20 y su evolución ha sido muy rápida", afirma su orgulloso padre Sebastián Roco, ex zaguero de equipos como Cobreloa y San Felipe.
Hoy Bastián vive 100% enfocado en el fútbol y en aquel proceso también han influido alguna decisiones vinculadas con su vida personal que le han servido para organizarse mejor. Hace tres años pololea con Pía Francisca, a quien conoció en San Felipe, y con quien se fue a vivir a los 17 años. Ambos residen en un departamento en Concepción y tienen a Toby, un bulldog francés que esta semana cumplió un año de existencia ladrando y moviendo la cola.
"Ha sido una ganancia en todo sentido y yo estoy muy agradecido de ella porque ha renunciado a muchas cosas para apoyarme, incluso de estar con su propia familia. Tenemos una convivencia muy linda y ambos aprendemos del otro. Lo bueno fue que cuando les contamos a los papás de ella me dijeron que confiaban en mí y que a ella le iba a servir, aunque obviamente quedaron tristes. Ella estudia administración de empresas y cuando yo estoy concentrado también aprovecha de estar con su familia", añade Bastián.
Su papá, en tanto, se declara como un "buen suegro" y como alguien "comprensivo". "Su hermana Javiera tiene 20 años y también está pololeando, así es que sé de lo que se trata. Bastián con su polola lleva como tres años y siempre les he dicho que aprovechen el tiempo porque el futbolista en sí vive en una burbuja y tiene que tener claro el valor de la familia. Después cuando uno se retira es lo único que te queda", agrega Sebastián Roco.
Por su parte Bastián afirma que, como siempre está pensando en fútbol, trata de no exigirse mucho. "Bueno, además de estar con mi novia y con mi perro me gusta jugar pádel con mis amigos o ir a la playa. Pero trato de no moverme tanto para rendir en los entrenamientos. ¿Mi comida favorita? El salmón a la plancha con papas rellenas que me prepara mi novia. Le queda exquisito".
-¿Y en la cancha has aplicado algún consejo de tu papá?
-Jajajá, ahora es distinto. Ya no se pueden aplicar tantas mañas como las de mi papá en la cancha, porque te pueden expulsar. En la época de él, había más margen para hacer cosas en los córners, pero sí creo que he sacado de él la agresividad para ganar las pelotas divididas e imponerme en el juego aéreo.