Iyassna Muñoz (41), madre de Marcianeke, aún se ríe cuando describe su celebración de Año Nuevo. Ella junto a sus dos hijas, Marilyn (24) y Martina (16), viajaron desde Talca, ciudad donde viven, a Santiago para estar con Matías Muñoz, nombre del intérprete de los hits 'Dímelo ma" y "¿Qué pasa?".
Esa noche, dice ella, "no escuchamos radio porque mi hijo se pone nervioso con la cuenta regresiva para las 12, jajajá. Pero de repente escuchamos gritos y, aunque mis hijas tenían horas distintas, nos abrazamos igual. Después Matías corrió a buscar cotillón, nos tomamos una foto familiar y bailamos. Fue espectacular".
Iyassna Muñoz (@yassnita en Instagram) trabaja en el servicio público y hace poco terminó de estudiar para ser trabajadora social. Ella asegura que su hijo "estaba mal desde el invierno". A fines del 2022, el cantante contó en un live de Instagram que estaba en un proceso de desintoxicarse de las drogas. Luego, en "Urbanos" (TVN), se quebró y confesó: "Es fome llegar a todo esto y sentirse vacío igual". "Matías ya me había dicho que quería bajar el consumo (de drogas), porque le estaba pasando la cuenta. Para nosotros eso fue un alivio, una alegría y cuenta con todo nuestro apoyo", relata su progenitora.
Cuando vieron por TV la entrevista donde el joven lloró, "lloramos con sus hermanas y su abuela". "Matías tuvo que tocar fondo en todo. La droga le estaba afectando su salud y también emocionalmente. Se dio cuenta de que se refugió en algo que no lo estaba llevando por buen camino. Ahora está mejor, es cosa de que tú lo veas. En sus shows interactúa con el público, se desenvuelve de otra manera, se enfocó en hacer deporte y está entusiasmado con marcarse, jajajá", detalla Iyassna. Además advierte que su hijo "siempre ha sido delgado".
Parte de los cuidados que tiene con su heredero es "hablar todos los días por teléfono. Ya le conozco el tono de voz, sé cuando está bien o está mal, y él me manda fotos y videos. Si está mal, hago un viaje exprés a Santiago y no me voy hasta que lo vea bien. Me reparto entre mis tres niños. Cuando leo cualquier cosa sobre él, lo llamo, pero siempre quiere demostrar que todo está bien. No le gusta darle problemas a nadie".
Cuando Iyassna lo visita en su casa, le ordena la ropa y le cocina sus platos favoritos: pantrucas, arroz con salsa de tomate junto a un huevo frito y completos mojados (típico de Talca). Otro ingrediente clave es que "todo tiene que llevar papas fritas" y le pide "tres veces al día que le haga comida". "Cuando estamos juntos, lo regaloneo, le dejo comida para que después se la caliente y le hago su cama", agrega.
Otra constante en la dinámica familiar es "celebrar todos los logros de mis hijos. Matías ahora me comparte todo y yo, feliz. Cuando está con algún artista, me llama para presentármelo, jajajá".
-¿Qué consejo le ha dado?
-Siempre le aconsejé"Matías, preocúpate por ti". Ahora es bueno escucharlo decir que lo más importante es él y su familia. El año pasado también estuvo mal de la guata, no dormía nada, tuvo gastritis, se estaba alimentando mal y seguía grabando en el estudio y haciendo shows. Me dolía verlo porque compartíamos poco. Dormía un par de horas y tenía que grabar o ir a un evento a beneficio. Se sobre exige.
Sin maldad
Mientras sus hijos estaban en el colegio, Iyassna Muñoz, quien se separó del padre del cantante, era una madre muy estricta y una de las reglas era que nadie salía después de las IO de la noche. Cuando Matías cumplió 18 años, él le anunció que se iba de la casa. "Me dijo que no estaba el espacio para hacer música, necesitaba experimentar y saber cuando hace falta algo", detalla. Otra de las frases de su hijo fue: "Ya saqué el cuarto medio y ahora tengo que buscármelas".-¿Qué más recuerda de esa época?
-Matías no tuvo riqueza, pero nunca nos faltó ni tuvo problemas con la justicia. Lo que sí es que llegamos al tema del consumo. Pero al no estar vinculados con las drogas, no supe darme cuenta de que él estaba consumiendo. Nunca lo vi. Él siempre es para adentro.
-¿Qué es lo que más admira de su hijo ahora?
-Me enorgullece cómo es como ser humano. Matías no ve maldad en la gente, nunca espera nada a cambio, da todo sin interés. Eso me llena más que todo lo que tiene hoy día.