"Vaya a mi funeral como se va a un carnaval". Ese es uno de los versos que escribió Erick Pohlhammer y que, según sus cercanos, retrata la personalidad festiva de la que hizo gala hasta este lunes, cuando a las 6 de la mañana falleció en la casa de su esposa Verónica Frazier, en Concón, a sus 68 años. La figura televisiva y también uno de los poetas más importantes de las últimas décadas (ver nota en página 30 ) sufrió un accidente cerebrovascular a principios del año pasado y luego le fue detectado un tumor cancerígeno en el cerebro que lo limitó.
"Murió tranquilo, en paz, en el sueño, como él quería. Costó su partida, los últimos días ya no comía ni bebía. El fue bien resistente y fue como una velita que se fue apagando. El estaba al tanto y quería irse porque nunca le tuvo miedo a la muerte. Estaba cómodo en la casa, en una cama clínica, con mucho amor y las cosas que le gustaban", detalla Verónica sobre el poeta feliz, como también era conocido Pohlhammer.
"El tumor cerebral fue como un cometa Halley en su cabeza, le tomó toda la parte derecha, entonces no podía escribir, no se podía mantener parado. Ya llevaba unos 15 días así en cama y los médicos me dijeron que era parte del proceso", sigue. "Erick fue un hombre que disfrutó de la vida y fue feliz, y eso es Io que más quería que dijeran de él. Aunque partió joven, vivió siempre su vida como quiso. Yo estoy tranquila, con mucha pena", reconoce.
La noticia también impactó a sus amigos y a quienes trabajaron con él. Julio César Rodríguez se enteró durante su matinal "Contigo en la mañana" (CHV) y aprovechó un momento sin cámaras para escribirle una dedicatoria en su Instagram y mostrar fotos de su último encuentro a fines de 2022. JC trabajó por años con Pohlhammer cuando éste fue panelista en sus programas "Sin dios ni late" y "Síganme los buenos".
Julio admite: "Me pegó fuerte su partida. Cuando lo vi él ya casi no podía hablar, sólo murmuraba despacito, pudo hilvanar ideas pero ya no podía leer ni escribir. Qué complejo para él que era un conversador innato, alguien que vibraba haciendo reír. Su enfermedad fue tan cruel con lo que él era. Le llevé una camiseta de Curicó Unido porque a los dos nos gustaba, estábamos viendo la (copa) Libertadores, y un librito, entre otras cositas. Me quebré un poco cuando fui a verlo, a nosotros nos gustaba hablar como relator deportivo y me dijo n o, no, no . El no quería que estuviera triste".
¿Qué recuerda de él como panelista, Julio?
"Erick ha sido uno de los mejores panelistas que he tenido. Era loco, llevaba invitados y nunca avisaba. Una vez dijo que llevaría un marciano y apareció un tipo pintado entero de verde todo serio... Delirante. En otra ocasión retó a Vasco Moulian, otro panelista, a una pelea de box (hÜps://bit.ly/31uYSk0), trajimos un réferi profesional y Erick se entusiasmó pegando, me puso nervioso".
Leo Caprile fue otro que compartió con Pohlhammer cuando él animaba "¿Cuánto vale el show?" en los 90 y Erick fue jurado. "Erick fue un personaje alucinante, inolvidable y queridísimo. Estuve con él el año pasado antes de su ACV cuando vino a mi casa con otros amigos para contarme que tenía un proyecto. Era estimulante entrar en un diálogo con él, podías hablar desde fútbol a la coronación de un rey, hablar con él era entrar a Oz, a otro plano. Cuando grabábamos empezaban los ¿y dónde está Erick? porque no aparecía y era que se ponía a conversar con alguien del público o estaba en una plaza hablando con estudiantes sobre Huidobro o Neruda... Yo escribo poesía desde muy chico y una vez Erick, en la época del programa, me hizo mostrarle un poco. Leyó algo y me dio 20 lucas, jajajá. Me decía que estaba muy bueno".
En 2014 el poeta ingresó al reality "Generaciones cruzadas" (Canal 13) con su "hijo espiritual", el cantante y ex "Mekano" José Miguel Pujol (@somosamorchile). "Erick me dijo que yo lo convencí de entrar porque le insistí que mucha gente tenía que escucharlo y verlo. Fue un elixir para muchas personas deprimidas; a mí me alegraba el alma con su locura linda. Al director (del reality), Sergio Nakasone, a quien todo el mundo le tenía mucho respeto, él le decía h ola, Sergio sin calzones, qué gusto de verte Erick rompía con amor todos los esquemas y para mí él es eterno".
Este martes los restos de Erick Pohlhammer serán incinerados en el Parque del Recuerdo.