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Fatal carrera clandestina terminó con dos personas atropelladas

"El auto aceleró y comenzó a coletearse, entonces el conductor perdió el control del auto, atropellándome a mi, mi amigo Renato, quien luego falleció; y otras personas", fue la declaración breve, pero concisa, de Ignacio Marchant, una de las siete personas atropelladas en la noche del sábado en la intersección de calles Juncal con Galvarino, en la comuna de Quilicura y en medio de una carrera clandestina.

Renato Ramírez, de 16 años, y María José Ortega, quien tenía 12 semanas de embarazo, fallecieron en el lugar. Otras personas que habían llegado a observar estos piques terminaron con fracturas expuestas y, hasta el cierre de esta edición, otro asistente se encontraba con riesgo vital.

Fue a eso de las 23 horas, cuando el Ford Mustang de Víctor Morales Fuentes se fue de cola e impactó contra la muchedumbre que se había apostado a ver las carreras. De acuerdo con la declaración que leyó el fiscal Esteban Silva, de la Fiscalía Centro Norte, Morales Fuentes salió a eso de las 21 horas de su casa en Renca. Según contó, iba a las carreras clandestinas que se hacen en Quilicura.

"Recuerdo que pasamos a comprar a un McDonald's y luego partimos hacia las carreras. Al llegar a calle Juncal, me percato que había una gran cantidad de gente al costado de la calzada y sobre el bandejón, por lo que hice ingreso en el vehículo de manera rápida y al avanzar un poco más, perdí el control del vehículo. Chocamos una solera y se activaron los airbags. El auto giraba en una dirección que desconozco, y luego se detuvo. Me rescató la gente que estaba ahí, y ahí me di cuenta que había atropellado a la gente que estaba en el bandejón", relató.

El conductor quedó en prisión preventiva por los 120 días que dure la investigación. El fiscal Silva explicó que a Morales Fuentes se le formalizó por una norma especial de la Ley de Tránsito, "que tiene relación con aquella persona que participa en carreras clandestinas y, como en este caso, produciendo la muerte de una persona o provocando lesiones graves, como también es el caso".

¿Pero estaba participando en las carreras?

"Por los antecedentes que manejamos, sí".

A la audiencia también llegó David, tío de Renato Ramírez, "un muchacho muy de su casa, muy responsable, al que le encantaban los eventos familiares", como lo describió. Dijo que iba encomendado por los padres. "Ellos me pidieron expresar que no quiere que otros hijos salgan a la calle caminando y vuelvan a la casa en un cajón. Lo que hemos vivido hoy es una cosa que no puede pasar en nuestro país a nuestros niños. No hay consuelo, pero las pruebas son contundentes", añadió.

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