Primero se subió gateando por la recepción de equipaje de un counter de atención de una aerolínea y luego, ya con más confianza, caminó hasta subirse a la correa transportadora. Así comenzó el extraño paseo de un niño —de aproximadamente cuatro años- que, sin que nadie lo viera, abordó la cinta en movimiento y realizó el mismo recorrido que una maleta en el Aeropuerto de Santiago.
La escena ocurrió el jueves pasado y quedó registrada en las cámaras de seguridad del recinto. Las imágenes muestran al pequeño sentado tranquilamente, mientras la correa transportadora lo llevaba a través del Baggage Handling System (BHS), como se denomina al sistema que distribuye el equipaje en el piso menos uno del terminal aéreo.
En algún momento, el pequeño baja por una especie de tobogán y llega a una separación de trayectos, donde una paleta lo golpea suavemente para desviarlo a otra correa. En las redes sociales lo comparaban con la película "Toy story 2", cuando Buzz Lightyear y sus amigos corrían frenéticamente sobre una cinta de aeropuerto, en busca de una maleta.
Finalmente, otra cámara muestra que un trabajador del sector de equipaje nacional, donde se realiza el control antes de cargar las maletas en el vehículo que las lleva al avión, detiene la correa y sube a buscar al niño.
Lo toma en brazos y se lo pasa a otro trabajador, vestido de negro, que lo esperaba abajo. Entre los dos rescatan al pequeño, que a primera vista, se ve ileso. De acuerdo a los relojes de las cámaras, su inédito viaje sobre la cinta duró poco más de tres minutos.
Counter vacío
Según una persona que trabaja en el aeropuerto, la situación se produjo muy tarde, cuando ya se estaba retirando el personal. Por ese motivo, dice, nadie se percató de la presencia del niño, que ingresó a la cinta a través de un mesón que se encontraba vacío.Afortunadamente, dice, el menor se sentó y no se movió, lo que evitó que se pegara en la cabeza. Además, la cinta tiene protecciones en su costado, para que las maletas no se caigan.
Otro trabajador destaca que hay cámaras en todo el trayecto del equipaje; gracias a eso se dieron cuenta del polizón y dieron aviso para que lo rescataran.
"Es muy difícil que se meta una persona", asegura. "Un adulto lo detectan de inmediato las cámaras y, si ocurre, la cinta se detiene automáticamente. En este caso no sucedió por el peso del niño, no hubo entorpecimiento para que parara la cinta", relata el testigo.
Aeropuerto investiga
Desde el terminal aéreo emitieron un comunicado."El Aeropuerto de Santiago cumple todos los estándares internacionales de seguridad en términos del diseño de su infraestructura y cuenta con la tecnología de cámaras y dispositivos que permiten detectar situaciones anómalas y, de esa forma, evitar incidentes", señala el texto.
"El funcionamiento correcto y seguro de la infraestructura operada por las aerolíneas y sus empresas de handling, como los counters de check, las pesas y las cintas de ingreso del equipaje de bodega, son de responsabilidad del personal contratado por las compañías aéreas para estos fines", agrega.
"Estamos recabando toda la información para determinar cómo se produjo esta situación y reforzar medidas y protocolos de resguardo con los operadores de las aerolíneas para evitar que se repitan, más allá de la responsabilidad que deben tener lo padres y cuidadores por los niños y niñas a su cargo", concluye el documento.