Al mediodía de este jueves más de 20 autos se amontonaron en la estación Shell, ubicada en la esquina de calles Eyzaguirre con América, en San Bernardo. Mientras los conductores miraban con caras largas, dos grúas comenzaron a acarrearlos hasta un taller mecánico.
La mayoría llevaba casi cinco horas en el lugar. "A las 7:10 cargué 20 mil pesos de bencina de 93 octanos. No alcancé a andar ni tres metros cuando el auto se paró. Levanté la cabeza y me di cuenta que los dos que habían salido antes que yo estaban en las mismas", relató Marisol Durán, propietaria de una Great Wall Hover.
Lo mismo ocurrió con los vehículos que cargaron combustible después de ella. "Una que es del pueblo sabe qué le pasa a un auto cuando le echas agua. Todos los de la fila coincidimos con el diagnóstico y así se lo dijimos a los encargados del servicentro", continuó Marisol.
Gonzalo Ayala iba delante de ella en su Mazda Artis. "Cuando quedé botado y le fui a decir al bombero, me contestó que fue porque pasé rápido por arriba de una poza. Pero resulta que en pocos minutos éramos más de diez autos tirados. Recién ahí nos reconocieron que sus estanques de combustible se filtraron con agua", contó.
En el caso de Marisol Durán la situación se complicó. "Mandaron un mecánico de la bomba para purgar (vaciar) mi camioneta. Me dijeron que le echarían de 97 para que tuviera más fuerza el motor. Pero nuevamente no alcancé a andar tres metros. i También estaba con agua!" reclamó.
Alfredo Medina quedó botado con su Renault Clio en plena Autopista Central. "Alcancé a manejar cuatro kilómetros y medio. El auto de repente se chupó y comenzó a perder fuerza hasta que se detuvo".
Cuando llegó a su casa mojado y con el vehículo en panne, leyó los WhatsApp de los apoderados del colegio de su hija. "Estaban advirtiendo que no viniéramos a este servicentro, pero ya era tarde".
El efecto
El ingeniero mecánico y magíster en ingeniería, José Miguel ORyan, hace una aclaración esencial. "El agua es un fluido incompresible. Al dar contacto al motor, el pistón comienza a subir y bajar. Su fuerza de empuje con un fluido que no comprime, puede provocar daños severos en el motor, como la rotura del pistón, la biela e incluso el cigüeñal".Por eso, dice, cuando ocurre esto jamás hay que dar contacto al motor. "Lo mismo ocurre si alguien se equivoca y coloca diésel en lugar de bencina. Cuando uno gira la llave, el sistema de inyección energiza la bomba para tener presión. Ese caudal contaminado se distribuye por todo el sistema. Se pueden oxidar los inyectores y la bomba de combustible, y saturar los filtros de combustibles".
"El agua no se mezcla con la gasolina, que se va al fondo del estanque", agrega Francisco Valenzuela, académico del Departamento de Ingeniería Mecánica de la Usach.
¿Qué hacer entonces? "Limpiar todo el estanque de combustible y el conducto de inyección", indica ORyan.
¿De qué manera, profesor?
"El riel de inyección, que es donde van ubicados los inyectores, tiene una válvula de despiche. Se mete bencina a presión y se saca por el despiche. Posteriormente se sacan los inyectores y se limpian. Luego se cambia el filtro de combustible. Lo ideal es cambiar también la bomba". El ingeniero afirma que de todo este proceso de limpieza lo más costoso es la mano de obra. "Es un trabajo lento, de unas cuatro horas. Los repuestos no son tan caros, 50 mil y 60 mil pesos el filtro de combustible y sobre 100 mil la bomba".
La empresa responde
Mientras que los encargados del servicentro de San Bernardo se negaron a entregar declaraciones, Enex Chile (matriz de Shell en el país) emitió un comunicado: "A raíz de las intensas precipitaciones que han afectado el día de hoy a la Región Metropolitana, se filtró agua en un estanque de combustible".La empresa agregó que contactarán a los clientes. "Enex responderá a los vehículos afectados, que serán enviados a un servicio técnico para su oportuna revisión y reparación".